junio 26, 2009

LA MASONERIA Y LOS TEMORES POLITICO-RELIGIOSOS

De la web Humanitas
El Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, Juan José Oyarzún, sostuvo que en los tiempos que corren la Masonería ya no produce temores políticos como tampoco religiosos, gracias a la apertura inducida en la actualidad. La afirmación la hizo al intervenir en la ceremonia de Consagración del nuevo Templo de la R:. L:. "Acción Fraternal" Nº 42 del Valle de Ovalle.La consagración del Templo la R:. L:. "Acción Fraternal" Nº 42 del Valle de Ovalle, -cuyo Venerable Maestro es el Q:. H:. Mario Bonilla Ramírez-, coincidió con el nonagésimo segundo aniversario del Taller, correspondiendo a la Jurisdicción de La Serena.El Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, Juan José Oyarzún, sostuvo que en los tiempos que corren la Masonería ya no produce temores políticos como tampoco religiosos, gracias a la apertura inducida en la actualidad.La afirmación la hizo al intervenir en la ceremonia de Consagración del nuevo Templo de la R:. L:. "Acción Fraternal" Nº 42 del Valle de Ovalle, la que tuvo lugar el sábado 16 del presente mes de mayo en la ciudad capital del Limarí, a 412 kilómetros al norte de Santiago.La Comisión Consagradora estuvo presidida por la máxima autoridad de la Masonería chilena e integrada por el 1º Vigilante y Gran Delegado del Gran Maestro para la Jurisdicción de La Serena, Rolando Cantarutti Jageiaux, y el 2º Vigilante y Pro Gran Secretario General, Osvaldo Maldonado Bustamante.La consagración del Templo la R:. L:. "Acción Fraternal" Nº 42, -cuyo Venerable Maestro es el Q:. H:. Mario Bonilla Ramírez-, coincidió con el nonagésimo segundo aniversario del Taller, correspondiendo a la Jurisdicción de La Serena.ORDENES CONSTRUCTORAS.
El Gran Maestro de la Gran Logia dijo en la oportunidad que "una característica esencial de la Masonería, además de ser iniciática, y quizá la que la define más certeramente, es la de ser heredera de las órdenes constructoras medioevales. En la antigüedad los secretos de oficio artesanal siempre se conservaron y desarrollaron alrededor de un mito relacionado con la construcción". Agregó que "en esos tiempos el aprendizaje de cualquier oficio implicaba a su vez una iniciación, y así, fuera de aprender las técnicas artesanales específicas, el fundamento teórico se hacía en lenguaje y simbolismo mítico, logrando así que el ejercicio de cualquier oficio artesanal fuera una mística". Juan José Oyarzún precisó que "esto es lo que es la Masonería: un Mito Constructivo, que enseña la transformación del alma a través de una Simbología espiritual del Arte de Construir Templos, tanto así que al Ser Supremo lo llama el Gran Arquitecto del Universo, y los grados básicos de su estructura iniciática son los tradicionales de cualquier obra de construcción: aprendiz, compañero y maestro".
MÍSTICOS DEL NÚMERO.
Más adelante, el Gran Maestro resaltó que "los masones son místicos del número, como los pitagóricos, y eso nos inclina a columbrar que la masonería podría ser una Religión Iniciática de la Naturaleza, cuyos fundamentos, como la Cábala, el Hermetismo y el Neoplatonismo, la hicieron encarnar la historia esotérica de la sociedad cristiana, desde el Renacimiento hasta la Revolución Industrial". Puso énfasis en que los masones no postulan, entre otras opciones, a considerar sus posibles raíces históricas con los Templarios, pese a existir variantes míticas que unen a ambas instituciones. Finalmente, señaló que "en los tiempos que corren, la Masonería ya no produce temores políticos como tampoco religiosos, gracias a la apertura inducida en la actualidad. Tiene pleno derecho entonces a cumplir su labor y enseñar públicamente sus perspectivas espirituales y simbólicas sobre los temas que atañen a la Naturaleza, el Hombre y la Sociedad".